Existe una gran diferencia entre un productor que tiene título de propiedad y uno que no cuenta con el título, lo que demuestra la importancia que tiene la gestión que lleva adelante el INDERT, y que es una de las prioridades del gobierno del presidente Santiago Peña y el vicepresidente Pedro Alliana.
Actualmente, los pequeños productores agrícolas pueden acceder en el Banco Nacional de Fomento (BNF) a un crédito denominado “Chokokue Peguarã” hasta 25 salarios mínimos, es decir, hasta la suma de 70 millones de guaraníes a un plazo de 2 años. Para el efecto debe estar formalizado.
Estar formalizados significa que tiene que tener registro de pago Iracis y demostrar trazabilidad de producción y comercialización, que son como el aval de su producción y es un gran avance al que llegó al BNF, porque anteriormente solo financiaba a los productores con título de propiedad.
Pero, si el pequeño productor agrícola quiere crecer y acceder a créditos de inversión sí requiere de una garantía real, como el título de propiedad. Y es ahí donde tiene una fundamental importancia lo que hace el INDERT, de la mano de su presidente, profesor Francisco Ruiz Díaz, considerando que los créditos de inversión ya pueden ser de hasta 5 a 10 años de plazo.
Desde el año pasado existe una coordinación entre el BNF y el Crédito Agrícola de Habilitación (CAH) para proveer financiamiento a los colonos asentados y que producen en las colonias del INDERT y a medida que se entregan los títulos aumenta el potencial de los campesinos beneficiados.