Presidenta del INDERT, a favor de veto parcial a la Ley o un proyecto nuevo
La presidenta del INDERT, Mag. Abg. Gail González Yaluff, busca solución a las familias campesinas de Marina Cué, Curuguaty, Canindeyú, en el marco del respeto a la Ley de Deforestación Cero, de manera a posibilitar un asentamiento humano sostenible y sustentable, con respeto al medio ambiente.
González Yaluff dijo que se está trabajando para dar solución a un caso emblemático y de mucho tiempo que afecta a los compatriotas, cuidando el tema ambiental.
Refirió que la Ley sancionada está en manos del presidente Mario Abdo Benítez. "Es un problema social de larga data, que se necesita resolver. Nuestra recomendación fue el veto parcial, de manera a conciliar la solución de la problemática social con la preservación ambiental", indicó.
Se busca preservar la zona de reserva y como alternativa brindar una solución utilizando las 800 hectáreas que ya fueron deforestadas, antes de la aprobación de la Ley de Deforestación Cero.
"Estamos trabajando para realizar una reunión, de manera que el presidente decida con todos los elementos técnicos a mano. Para que se pueda trabajar exclusivamente sobre el área que comprenden las 800 hectáreas, se requiere un veto parcial a la Ley o un nuevo proyecto. La postura del INDERT es favorable al veto parcial, pero todo está en estudio. La decisión final corresponde al presidente de la República. Es nuestra intención incluso pasar todas las tierras de reservas que están a nombre del INDERT al MADES, de manera a garantizar la preservación", manifestó la titular del ente rural.
González Yaluff informó que “el INDERT estuvo estudiando con otras entidades involucradas en la preservación del ambiente varias opciones. En ese sentido, hemos ofrecido alternativas como 1.700 hectáreas de reserva de Karapai, Amambay, para compensar la posible transferencia de Marina Cué. Encontramos dificultades para concretar que nos transfieran por la Ley de Deforestación Cero y buscamos hacer medidas que no riñan con las normativas. Cabe señalar, que de acuerdo a los informes que tenemos siempre fue un asentamiento humano en gran parte”.
Recordó que antes de que se apruebe la Ley de Deforestación Cero, unas 800 hectáreas fueron deforestadas. "Estamos trabajando sobre las 800 hectáreas, donde ya había asentamiento humano, no sobre las que son destinadas a reserva. Lo que se busca es preservar el ambiente y conciliar el derecho de las familias a la tierra propia”, concluyó.
